¿Cuándo se convirtió el comer solamente atún en una estrategia para perder peso? Este fenómeno pescado ha ganado popularidad entre aquellos desesperados por perder kilos rápidamente. La dieta del atún promete una pérdida de peso rápida a través de una restricción calórica severa. Funciona, técnicamente. Perderás peso rápido. Pero lo mismo pasaría si no comieras nada más que cartón durante tres días.
La fase inicial te restringe a atún y agua. Eso es todo. Nada más. Es básicamente una dieta de inanición con algo de proteína agregada. Sí, el atún está lleno de proteína magra, ácidos grasos omega-3 y vitaminas D y B12. Cosas excelentes. Pero tu cuerpo necesita más de lo que viene en una lata.
Atún y agua. Eso es todo. Una dieta de inanición disfrazada de nutrición. Tu cuerpo merece algo mejor que lo que hay en esa lata.
La gente pierde kilos rápidamente porque apenas está comiendo algo. Es matemática básica. Consume menos calorías de las que quemas, el peso se va. La báscula se mueve. La gente se emociona. Le dicen a sus amigos. El ciclo continúa.
Pero seamos realistas. Esto no es sostenible. Ni inteligente. La tasa metabólica basal disminuye significativamente cuando se siguen dietas restrictivas extremas como esta.
Después de la fase inicial de tres días, gradualmente agregas otros alimentos. Demasiado poco, demasiado tarde. El daño está hecho. Tu metabolismo se ralentiza. Tu cuerpo piensa que está muriendo de hambre, porque lo está. ¿Y esa masa muscular de la que estás orgulloso? Desapareciendo más rápido que el atún en una convención de gatos.
También está el problema del mercurio. El atún contiene mercurio. Come demasiado y te arriesgas a envenenarte. No es exactamente un punto de venta en los planes de dieta.
¿Quieres saber qué dicen los expertos científicos sobre la dieta del atún? Nada. Porque no hay respaldo científico más allá del obvio principio de «come menos, pesa menos». La dieta recibió una pésima puntuación de Healthline de 1.21 sobre 5, indicando serias preocupaciones sobre su eficacia y seguridad.
Para resultados duraderos, necesitas planes de comidas equilibrados. Cambios consistentes en el estilo de vida. Control de porciones. Ejercicio. Aburrido, ¿verdad? No tan emocionante como «¡pierde 5 kilos en tres días comiendo solo atún!» Pero funciona.
La dieta del atún es como usar una motosierra para cortarte las uñas. ¿Efectiva? Quizás. ¿La herramienta correcta para el trabajo? Absolutamente no.
Los nutricionistas constantemente aconsejan en contra de estos enfoques extremos, enfatizando en cambio la importancia de estrategias sostenibles para perder peso que incluyan una variedad de grupos de alimentos y actividad física regular.